HOMENAJE 1

Queremos agradecer a nuestras amigas de la IAIA que nos ayudan a poner en valor el trabajo de nuestras tejedoras a través de una regalo muy especial, una cajita de "The Lana Box". Nuestra primera cajita fue para Carmen, queremos dejar aquí la entrañable carta que para la Asociación nos dejó su hija María: Esta es Carmen, mi madre. Tiene 8 hijos, 18 nietos y un bisnieto. Desde que tengo uso de razón la recuerdo tejiendo, con una rapidez y una perfección que no he visto pocas veces. Nos lo hacía todo, desde las molestas braguitas caladas de perlé hasta los abrigos en invierno. Ahora tiene 92 años y hace ya muchos, perdió la vista por glaucoma. Al principio no fue fácil, no podía hacer lo que más le entretenía porque no podía ver, y se consideraba demasiado mayor para aprender cosas nuevas. Pero uno de sus "defectos" es que no puede estar mano sobre mano, así que se tragó la rabia por perder la vista y lo intentó. Empezó con sencillas vendas que ya había tejido de joven, bufandas, gorros, cuellos.... Tejió más de 100 toquillas para bebés porque en su parroquia hicieron una petición especial para una casa de madres de acogida. Verdaderamente nos hizo trabajar para buscar modelos nuevos, cada vez un poco más complicados, pero que pudiera tejer y la producción de disparó. Por suerte LA IAIA se cruzó en nuestro camino en un momento crucial y fue un gran alivio. No sólo porque se encargaba de recoger y repartir las prendas que tejía, sino porque encontramos personas dispuestas a completar lo que ella no podía hacer ( costuras, botones...) formando un equipo perfecto. Le encanta saber dónde van a parar sus chaquetas y oír la descripción que le hacemos de las fotos que manda Concha con l@s niñ@s abrigados y tan guap@s. Es una motivación irresistible para ella saber que lo que hace es útil para alguien y mucho más si son niños. Desde que conocí la IAIA pensé que esta ocurrencia de Concha era una idea brillante, seguramente por eso ha crecido de una manera tan asombrosa. Ahora se le ha ocurrido visibilizar a tantas buenísimas personas que con su trabajo desinteresado y su ilusión ayudan a mejorar este mundo. A pesar de que mi madre dice que seguro que muchas otras personas lo merecen antes que ella, queremos agradecer este reconocimiento. De esta manera podemos conocernos mejor, conocer a todas las personas que con cariño e ilusión ayudan a personas que con cariño e ilusión ayudan a los demás pese a las circunstancias de cada uno. Un abrazo entrañable a todas ellas